La Cuaresma es el tiempo litúrgico del calendario cristiano destinado a la preparación espiritual de la fiesta de la Pascua. Comenzó el pasado miércoles 26 de febrero 2020 (miércoles de Ceniza) y terminará el jueves 9 de abril (Jueves Santo). Durante estos 40 días, todos los bautizados estamos llamados a la conversión mediante la oración, el ayuno y la limosna.
3 CONSEJOS PARA VIVIR MEJOR ESTA CUARESMA
1. Pasa por el confesionario... ¡y anima a tu entorno a ello!
Siempre he visto el confesionario como una lavadora gigante, que nos limpia de nuestros pecados. ¿Pecamos? ¡A la lavadora! Especialmente la Cuaresma es un buen momento para confesarte y retomar tu conexión personal con Dios. Si hace siglos que no te confiesas, te recomendamos este vídeo sobre Regreso a Ítaca (30min), con los testimonios de varias personas que -después de años alejados de la Iglesia- volvieron al Padre.
2. Cultiva tu espíritu, habla más con "el Jefe"
Somos cuerpo y alma, pero al alma la olvidamos muchas veces. ¡Recupérala! El alma es esa parte que nos diferencia del resto de los animales... es esa parte que nos acerca a Dios, y nos da la posibilidad de pedirle ayuda para afrontar lo que nos pasa en la vida desde la confianza de que Nuestro Padre nos ama y nos espera siempre. Nuestra tarea consiste en resintonizarnos con Él siempre que nos despistemos... y nunca olvidar que todos estamos llamados a ser santos para, después de esta vida, ir al Cielo, donde todo es AMOR.
De ahí la importancia del ayuno y la abstinencia. Es como decirle al cuerpo que él no nos guía. Nosotros le dominamos a él.
Para rezar más, si no tienes costumbre, puedes llevar un rosario y aprovechar los trayectos al trabajo para rezarlo, escuchar los 10 Minutos con Jesús, tener presente a la Virgen a las 12h con el rezo del Ángelus, intentar ir a Misa entre semana -además del domingo... en definitiva, "ser más pelota con Dios". Ah, y si no has hecho Emaús... ¡ya estás tardando!
3. Sé la "palanca" que los demás necesitan
¿Cómo puedes ayudar en tu entorno? Ese vecino/a que vive solo al que podrías visitar, esa sonrisa al que es borde contigo porque sí, esa defensa al que no está presente mientras otros le critican, ayuda al que no tiene amigos porque es pesado pesado... Cristo nos llama a que seamos otros Cristos.
También puedes rezar más por los demás: por toda la gente que está sufriendo las consecuencias de la guerra, el hambre, la enfermedad, la injusticia. Por el Papa, por la Iglesia, por que haya más vocaciones al sacerdocio y a la vida consagrada, por los matrimonios, para que sean muy santos y no tiren la toalla, por la unión de tantas familias alejadas por cualquier motivo, por los que está perdidos por las drogas, las redes sociales, el consumismo, el sexo o el poder. Por ti y por mi, y porque nos podamos conocer cuando coincidamos en el Cielo :)
No juzgues a nadie: no sabes lo que esa persona está viviendo, ni cómo es la mochila que lleva encima. Sólo se pueden juzgar los actos: buenos o malos, pero no las personas. A las personas hay que quererlas. Y ya está. Como dice una maceta que me regalaron una vez: La vida debería ser AMARILLA. Amar y YA.
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3 CONSEJOS PARA VIVIR MEJOR ESTA CUARESMA
1. Pasa por el confesionario... ¡y anima a tu entorno a ello!
Siempre he visto el confesionario como una lavadora gigante, que nos limpia de nuestros pecados. ¿Pecamos? ¡A la lavadora! Especialmente la Cuaresma es un buen momento para confesarte y retomar tu conexión personal con Dios. Si hace siglos que no te confiesas, te recomendamos este vídeo sobre Regreso a Ítaca (30min), con los testimonios de varias personas que -después de años alejados de la Iglesia- volvieron al Padre.
2. Cultiva tu espíritu, habla más con "el Jefe"
Somos cuerpo y alma, pero al alma la olvidamos muchas veces. ¡Recupérala! El alma es esa parte que nos diferencia del resto de los animales... es esa parte que nos acerca a Dios, y nos da la posibilidad de pedirle ayuda para afrontar lo que nos pasa en la vida desde la confianza de que Nuestro Padre nos ama y nos espera siempre. Nuestra tarea consiste en resintonizarnos con Él siempre que nos despistemos... y nunca olvidar que todos estamos llamados a ser santos para, después de esta vida, ir al Cielo, donde todo es AMOR.
De ahí la importancia del ayuno y la abstinencia. Es como decirle al cuerpo que él no nos guía. Nosotros le dominamos a él.
Para rezar más, si no tienes costumbre, puedes llevar un rosario y aprovechar los trayectos al trabajo para rezarlo, escuchar los 10 Minutos con Jesús, tener presente a la Virgen a las 12h con el rezo del Ángelus, intentar ir a Misa entre semana -además del domingo... en definitiva, "ser más pelota con Dios". Ah, y si no has hecho Emaús... ¡ya estás tardando!
3. Sé la "palanca" que los demás necesitan
¿Cómo puedes ayudar en tu entorno? Ese vecino/a que vive solo al que podrías visitar, esa sonrisa al que es borde contigo porque sí, esa defensa al que no está presente mientras otros le critican, ayuda al que no tiene amigos porque es pesado pesado... Cristo nos llama a que seamos otros Cristos.
También puedes rezar más por los demás: por toda la gente que está sufriendo las consecuencias de la guerra, el hambre, la enfermedad, la injusticia. Por el Papa, por la Iglesia, por que haya más vocaciones al sacerdocio y a la vida consagrada, por los matrimonios, para que sean muy santos y no tiren la toalla, por la unión de tantas familias alejadas por cualquier motivo, por los que está perdidos por las drogas, las redes sociales, el consumismo, el sexo o el poder. Por ti y por mi, y porque nos podamos conocer cuando coincidamos en el Cielo :)
No juzgues a nadie: no sabes lo que esa persona está viviendo, ni cómo es la mochila que lleva encima. Sólo se pueden juzgar los actos: buenos o malos, pero no las personas. A las personas hay que quererlas. Y ya está. Como dice una maceta que me regalaron una vez: La vida debería ser AMARILLA. Amar y YA.Recomendamos
- Leer el Mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma 2020, titulado: «En nombre de Cristo os pedimos que os reconciliéis con Dios» (2 Co 5,20).
- Escuchar el podcast de hoy de "10 Minutos con Jesús", que incluye algunas recomendaciones de cara a esta Cuaresma en relación a los sacrificios: "no dejes el chocolate, deja de quejarte, deja de criitcar a los demás a sus espaldas, deja de murmurar, deja de perder el tiempo, deja de perder el tiempo en el trabajo...¡deja de juzgar a los demás!".
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